Para tener unos labios atractivos, di siempre palabras amables. Para tener ojos adorables, mira siempre las cosas buenas de la gente. Para una figura esbelta, comparte tu comida con los que padecen de hambre. Para tener un pelo lindo, permite que un niño pase sus dedos por él, por lo menos una vez al día. Para mantener la elegancia, camina con la certeza de que nunca estás sola.