Decirle adiós a algo o a alguien que se quiere siempre es difícil. Pero si se hace por amor; entonces se vuelve..., fácil no, pero sí... aceptable. Sé que pronto seré llamada para una nueva misión y estoy lista para partir de nuevo, porque, ahora lo sé, cada viaje tiene un principio y un final, y si el final nos provoca tristeza, significa que ha sido un hermoso viaje y que nuestra maleta vuelve llena de recuerdos por los cuales ha merecido la pena viajar.