Yo te quiero besar lento, como esos besos que roban el aliento. Yo te quiero abrazar fuerte, como esos abrazos que saben dar fuerza en el alma. Yo te quiero llenar la mente de dudas, pero no sobre mi, sino de la realidad del mundo. Yo te quiero beber, como una pepsi o como la ultima gota de agua en el desierto. Yo te quiero, sí te quiero en mi existencia que da vida a una presencia mortal.