Cuando piense algo así como: "Éste va a ser un mal día", dígase a usted misma: "Voy a hacer de éste un buen día". Si alguna vez piensa: "Para qué intentarlo, siempre fracaso", dígase: "Voy a hacer la lucha. ¿Por qué no?". Si cuando algún automovilista le da un "cerrón" o le echa el auto cuando usted va caminando por la calle, en vez de responderle con algún comentario ofensivo, dígase que esta reacción suya puede provocarle que se eleve su presión arterial.